Una lágrima de sangre

El crepúsculo al borde de la cama
Un aroma, un doloroso calor de mañana
Me despierta soñando sin ti,
El viento, furioso iracundo, silva la ventana
Y yo a media pestaña, me intento abrir...
Subir la persiana para oler
La colonia barata, del amanecer...
Viajo de puerta a puerta entre la casa
Me tropiezo con los escombros de ilusiones
Caigo en ninguna parte, sonriéndole a la ausencia
De tus labios con los míos, ensangrentados dentro,
De las palabras como cuerpos... desnudos,
Y las horas pasan con prisa,
Entre el humo y la desdicha...
La conspiración de la lluvia y la noche,
Un inmóvil y largo vestido en el aire
La oscuridad busca, ciñe los ojos
Se escucha, el terror aullando en el alma,
El sutil sonido, de una lágrima de sangre
Que se suicida desde mi mejilla
Hasta el pétalo de una rosa negra...

Ciénaga de Sangre

Un libro sin páginas ni escudos
Un verso descarrilado en curvas
Y un paraíso de labios febriles,
Una chica de ojos de nubes
Un hallazgo desanudado de lágrimas
Y una cascada de leche alineada
Con cristales de esperanzas asqueadas.
Esgrimiendo mi bastarda espada de tinta
Voy escribiendo tu recuerdo en la pared
Escuchando mí sueño en agonía
Y la verdad llamando a la puerta
Con volteos volteados de cerca
Y un portal de celos y lujurias.
Yo soy tu amabilidad odiada
Tú eres mi chica amada
Y nuestra fusión es el dolor en conjunto,
Vacío y sin corazón de señales
Arenoso de tiempo y sonante
Llamando alas en los animales
Creando vampiros carnales
De fosas sin fondo ni calabozos
Dragones rojizos y platinos de oro.
Fantasmas de olvido olvidados
Fingiendo los medios de los finales ocultos
Con los que te muestras inmune y alegre
Suicidando la ciénega de sangre
Burlesco con la sátira de las palabras
Que conocemos y juntamos en nuestros cuerpos…

Alguna vez...

Alguna vez creí saber quien lloraría por mí, ahora sé que lloré conmigo.

Después de las ilusiones, llega la melancolía, los recuerdos de encuentros fallidos.

Pérdidas innumerables, de besos lascivos… suicidas de la soledad.

Si alguna vez llegué a estar en tus sensaciones, si alguna vez de verdad fui especial para ti… espero no haberte desilusionado… demasiado.

Adquirí un cuerpo, el cual debí regresar desde hace más de dos años; mi pretexto siempre has sido tú… mientras que tus errores son mi nombre…

No tienes que recordarme, la sabiduría ya me ha contado mis hazañas… y no queda más destino, que el que me has designado.

De acuerdo, estoy muerto… mas no he acabado, soy más que un loco… poco menos que el pavimento… e igualado con un agravio, sucio, torpe y callado…

Una y otra vez...

Cuando los bosques dejen de caminar
Y su melancólico canto,
Se extienda más allá de los campos,
De recuerdos y batallas.
Cuando el ejército olvidado
Memorice, aquel recuerdo
De la legión, de un páramo helado
Dentro de las venas,
Y en guerra la muerte
Ganándole, la vida
De una poesía
Pérdida, entresueño,
Y con una espada
Me hiere, el alma
Lejos de saber, o carecer
Destrucciones, a caballo
Sin jinetes, ni Apocalipsis
No hay hermanos
Estamos sólo con nosotros
Ni mismos, ajenos…
Ragnaroku, líbranos de ti,
Y la fuerza, de Satanás
No es más que el sentimiento…
La lujuria, pierde su lascividad,
Y la gravedad, aumenta con cada paso
Cada suspiro, cada grito y aullido,
Como si cortara, el viento
De lágrima, parten ramas
Y dividen sutilmente,
La verdad, y la realidad
Aplasta la negra noche,
La luna blanca, y sombreada
Sale tu estrella, asomándose
Atravesando harapos, de tu ventana
Surgen hermosas, cascadas castañas
Con dos peces, de un mismo color
Y unos labios carnosos,
Que sostienen, una delicada
Y hermosa tez… una y otra vez...